Salud, calidad de agua, arsénico en Antofagasta: Estudios científicos
El tema del arsénico en el agua que bebemos sigue siendo materia de preocupación a causa de sus efectos en la mortalidad de la Región de Antofagasta. En este artículo divulgaremos algunos trabajos del mundo académico sobre el tema. Por Jan Cademartori, Académico U. Católica del Norte.
En primer lugar, el contenido de arsénico en el agua de la ciudad de Antofagasta. En segundo lugar sus consecuencias sobre las enfermedades y la mortalidad. Finalmente, algunas propuestas.
En una reciente crónica, se informan mediciones provenientes del investigadorDomingo Román (Universidad de Antofagasta), quien, concluyen que las cifras son oscilantes en el tiempo, pero que en varios momentos, se ha sobrepasado hasta por tres veces la norma de arsénico en el agua de 10 ppb (partes por billón). Estos resultados no son ratificados por la empresa de agua potable y la Superintendencia que representa al Gobierno en el sector, para quienes se respeta la norma chilena.
Sin embargo, poco se conoce de dos publicaciones internacionales ((1) y (2), que cuentan con la colaboración de la profesora de la UCN, Susana Stegen. Ella es citada por un importante medio de prensa local (9) como directora del Laboratorio LSA, más bien para desmentir las mediciones del profesor Román. En una de estas publicaciones científicas (2), los investigadores señalan textualmente en su primera página y en sus conclusiones haber determinado que los niveles de arsénico del agua de Antofagasta estuvieron en niveles entre 40 y 20 ppb, es decir, cuatro y dos veces por sobre la norma actual, a partir de Septiembre de 2004 y durante dos años.
Por su parte, el Dr. Román y otros han investigado cómo el ambiente está afectando la mortalidad en la Región de Antofagasta (ver referencias al final de este artículo). Uno de sus trabajos se encontraba en Abril de este año, entre los top 20 en las mediciones de citaciones internacionales en el área. El Dr. Román cuenta con experiencia en el tema y es también recordado por haber sido designado perito judicial, cuando particulares denunciaron la contaminación del Río Loa a partir de las observaciones en el Tranque Sloman en los años noventa. Esta contaminación, provocó alarma pública, amenazas y despidos laborales en un importante medio de televisión, al punto que ameritó una tesis de una Escuela de Periodismo sobre el respeto a la libertad de prensa (3).
Otra fuente son médicos de varias instituciones de Santiago (4), quienes informan que el cáncer a la vejiga en la Región de Antofagasta es superior a la media del resto de las regiones de Chile. Esto se presenta tanto en hombres como en mujeres, muchos años después de que las plantas de abatimiento de arsénico fueran optimizadas y mejor operadas, lo cual no significa cero arsénico ni abatimiento exhaustivo.
Peor aún, esta publicación revela que la mortalidad por cáncer a la vejiga fue ascendente en los últimos diez años, particularmente en Antofagasta, respecto al año 1996 (ver Gráfico). Esto es explicado por la exposición al arsénico de niños que hoy son adultos y por el posible traspaso durante el período de desarrollo uterino. Tampoco se pueden descartar: el impacto ambiental por respirar aire contaminado, el arsénico por el polvo de los suelos, ni el factor epigenético, es decir, como el medio ambiente es capaz de perturbar el genoma humano.
En ese trabajo, se comparó un primer registro de pacientes incurables, de los años 1983 a 1989, contra otro registro entre 1999 a 2009. En el último año de la muestra, 2009, la tasa regional para hombres fue de 16,4 (contra 5,8 en Chile) mientras que la tasa para mujeres fue 13,5 (contra 2,5 a nivel nacional). Todas estas mediciones son por cada 100 mil habitantes.
Los resultados de esta investigación, fueron divulgados, a través de la editora internacional Bárbara Frazen, quien llamó a esta situación “el cluster chileno causado por la contaminación por arsénico” (5). Frazen destaca que por primera vez se pudo comparar con otras regiones de Chile y descubrir la trasmisión de la enfermedad entre generaciones. La divulgadora resalta que además de confirmarse otros trabajos previos, cuando este cáncer a la vejiga se presenta, resulta más agresivo en Antofagasta a juzgar por los menores años de vida que quedan al paciente
Otro estudio anterior (6), descubrió que el arsénico no solo influye en el cáncer, del mismo modo provoca enfermedades cardiovasculares. Lo que es más sorprendente, el lugar donde se vive o trabaja (Antofagasta) aparece como más influyente que otras causas ya conocidas (tabaco, colesterol, etc.). La muestra de la Región estuvo conformada por pacientes de la Clínica Antofagasta entre los años 1995 y 2000. Esta publicación con la autoría principal del Dr. Román (UA) contó con la participación de investigadores españoles y un médico. Este mismo académico aparece en otras revistas internacionales científicas, analizando los mecanismos que relacionan el cáncer y la diabetes, con el arsénico y otros metales (7) y (8).
Resumiendo, había varios estudios previos sobre el tema si bien, hace unos meses aparecía como sorpresa un informe oficial que aparentemente habría influido en la salida de un ex seremi de Salud. La presencia de metales y arsénico en el agua de Antofagasta acarrea graves consecuencias que heredan las futuras generaciones. A esto es probable que se añadan los efectos negativos causados por metales en el suelo y en el aire, abundantes en zonas mineras.
Ello impone la necesidad de una atención hospitalaria de primer nivel para los casos del presente y para los que necesariamente vendrán a futuro. Asimismo, coloca en entredicho la polémica decisión de haber privatizado la empresa de agua potable, sabiendo que la salud de la población está en juego y que ella no puede quedar subordinada al interés económico. Sobre todo, pone de manifiesto, la necesidad de crear un organismo permanente e independiente de Auditoría Ambiental a cargo de las regiones y que pueda ser de confianza de la población.
Además parece fundamental garantizar la libertad académica e incrementar sustantivamente el aporte estatal asegurado a la investigación, para impedir el financiamiento de las Universidades por parte de empresas que podrían sesgar sus investigaciones. El actual modelo de auto- financiamiento universitario, no solo restringe el acceso a los estudiantes de calidad que no cuentan con recursos económicos, también limita el rol crítico de las universidades en temas de la salud y medio ambiente al hacer depender el financiamiento de proyectos de entidades vinculadas al poder político y económico.
Agua: experto de la Universidad
Antofagasta registra altos niveles
de arsénico
Investigador Domingo Román revela mediciones de hasta 0,035 ppm del elemento químico en el agua potable. Sanitaria de Antofagasta enfatizó que están dentro de la norma chilena.
El investigador y jefe de la carrera de Química Ambiental de la Universidad de Antofagasta (UA), Domingo Román, registró la presencia de niveles de arsénico en el agua potable de Antofagasta superiores a lo permitido por la norma. Los análisis del experto evidencian variaciones en los parámetros de este elemento químico en el vital líquido.
Este análisis fue negado por la sanitaria Aguas Antofagasta, que explicó que realiza estudios a su producto todos los días y en distintos puntos de la ciudad. En dicho proceso –precisó la empresa- los resultados arrojan siempre niveles inferiores al límite establecido por la norma chilena (NCh 409/1. Of2005), que permite hasta 0,010 ppm (partes por millón) de arsénico en el agua potable.
Investigaciones
Sin embargo, Domingo Román, que posee numerosas investigaciones sobre los efectos del arsénico en la Región de Antofagasta, en importantes revistas científicas indizadas en la base de datos SciELO (Scientific Electronic Library Online) e ISI (Institute for Scientific Information), afirmó que en algunas ocasiones los niveles de este elemento en el agua potable de la capital regional llegan hasta 0,035 ppm, es decir, niveles tres veces superiores.
“El problema es que el arsénico en el agua no es constante, es muy variable. Si estuviera siempre en 0,010 ppm sería lo ideal, pero eso no es así”, subrayó Román.
Los datos -según explicó el científico- fueron obtenidos mediante un análisis instrumental llamado “Espectrofotometría de absorción atómica con generación de hidruros modo continuo”, técnica estándar para controlar los niveles de arsénico en el vital líquido a nivel mundial.
Sustancias
El académico, especializado en Química Ambiental, dijo que desde hace 10 años realiza mediciones respecto a los índices de sustancias presentes en el agua potable antofagastina. Cada mes aplica el sistema estándar y durante los dos últimos años los valores de arsénico alcanzaron en varias oportunidades 0,035 ppm, según puntualizó. “La última medición la realicé la primera semana de julio y los resultados arrojaron 0,019 ppm de arsénico en el agua potable”, dijo el experto.
Román precisó que el examen fue hecho del agua que emana de la llave y que los índices provocaron preocupación, debido a la repercusión en el plano de la Salud.
“El arsénico puede producir en las personas problemas cardiovasculares, cancerígenos y neurológicos”, destacó el investigador y coautor de estudios como: “Presencia de altos niveles de arsénico en tejidos cardiovasculares de pacientes de áreas contaminadas en Chile”, publicado en abril de 2012, en la Revista Chilena de Cardiología (Vol. 31, Número 1).
Calidad
El gerente de Clientes de Aguas Antofagasta, Francisco Meneses, dijo que el agua potable que produce la sanitaria es “un producto sano y de la más alta calidad”, postura que difiere del planteamiento expuesto por el investigador y químico.
“Para realizar mediciones certeras de arsénico a niveles de concentración de 0,010 ppm, no basta con tener un equipo de absorción atómica. Se requiere que los analistas tengan amplia experiencia validada en el uso de la técnica de ensayo y que éstos sean validados cada cierto tiempo por organismos competentes”, aclaró Meneses.
Este último sostuvo que la Secretaria Regional Ministerial de Salud y la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS) realizan mediciones constantes del agua potable de la sanitaria, cuyos resultados avalan el cumplimiento de la norma NCh 409.
El gerente de Clientes agregó que los análisis realizados son mediante la técnica de “Espectroscopía de absorción atómica con generación de hidruros”, proceso certificado por el Instituto Nacional de Normalización (INN), bajo la norma ISO-NCh 17025.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que la máxima concentración de arsénico en el agua potable segura para la salud es de 0,010 ppm, al igual que la norma chilena que antaño tenía un límite permitido de 0,050 ppm.
“La norma chilena ahora se equiparó con la de la OMS, que exige hasta de 0,010 ppm de arsénico (…) Algunos países cuando pueden se equiparan con la OMS, pero en Chile existe ambigüedad porque a veces se utiliza el límite 0,050 ppm”, afirmó el científico de la UA.
El 60% del agua potable que suministra Aguas Antofagasta a los clientes domiciliarios proviene de la planta desaladora y el otro 40% de las captaciones cordilleranas.
Éste es otro factor importante para Domingo Román, pues parte del agua captada proviene del Río Loa, considerado –según el investigador- como un río con grandes cantidades de arsénico.
Las altas concentraciones del elemento químico en el mencionado río hacen que sea necesaria que el agua captada sea sometida a un proceso de “abatimiento de arsénico”, que disminuye los niveles de este último.
“La sanitaria dice que llega a niveles inferiores de 0,010 ppm de arsénico, pero eso es a veces, porque nuestras mediciones comprueban que en muchas oportunidades el nivel está más alto”, acotó el investigador.
Ensayos
El gerente de clientes de Aguas Antofagasta detalló que el equipo que permite la medición de arsénico en su producto es revisado y sometido a mantenimiento por el proveedor dos veces al año, para así no vulnerar la normativa chilena.
“Nuestros analistas están calificados y cuentan con la experiencia de realizar más de 120 análisis mensuales de arsénico. Asimismo, para calibrar nuestro equipo usamos solamente material certificado”, subrayó Meneses.
La sanitaria también realiza ensayos de intercomparación con el laboratorio LGC de Inglaterra, acción en la cual participan más de 100 laboratorios de diversos países del mundo. “Nuestros resultados siempre son satisfactorios”, destacó el gerente.
En junio la SISS de la Región de Atacama sancionó a la empresa Aguas Chañar a pagar una multa de 74 UTA (Unidades Tributarias Anuales), es decir, $35 millones, por la alta presencia de arsénico en el agua potable de las comunas Diego de Almagro y El Salado
Dicha sanción económica en la vecina región fue producto de tres meses de investigación de parte de la SISS, que constató el incumplimiento de la norma 409 para los parámetros de arsénico y también cloruros, sólidos disueltos totales y sulfatos.
Referencia:
Mercurio de Antofagasta
Informe
del ISP confirma que las concentraciones de metales pesados en el
aire de Antofagasta son incluso más altas que las que obligaron a
cerrar la Escuela La Greda en la comuna de Puchuncaví y muy
superiores a normas internacionales. Miembros del movimiento
#EstePolvoTemata presentaron una denuncia a la PDI, a la vez que
convocaron a una nueva jornada de protesta.
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